Un beso es sólo un beso… ¿No es cierto?
Un beso es uno de los símbolos más potentes de intimidad. Se utiliza para transmitir desde el afecto de los padres hasta el al amor más apasionado (y ocasionalmente odio: recuerda el beso de Judas). Besar es una acción humana fundamental que ha tenido que ver con nosotros desde el principio de nuestra especie.
¿O no?
El beso es en realidad un fenómeno occidental y hay un montón de culturas que simplemente no se besan. El beso con la boca abierta, o el beso táctil, que vemos en las películas (y en la calle) es una algo nuevo, que sólo cuenta con alrededor de unos pocos cientos de años. Tradicionalmente, los japoneses no usan los besos como señal de afecto. Tampoco lo hacen muchas razas indígenas de África. Ninguna de las lenguas célticas tienen una palabra para ‘beso’, y tampoco la tienen las lenguas indígenas o malayas.
Así pues, ¿por qué besamos?
Los científicos americanos están casi seguros de que el beso que se produjo por el hábito de las madres de masticar los alimentos a sus bebés, y dárselo de boca en boca. Esa teoría está muy bien para dar cuenta del afecto de los padres, pero no explican realmente el beso amante, el beso de saludo, o el beso de la muerte.
Una mejor idea es que el beso tiene más que ver con el olfato que con el gusto. Mientras que muy pocas culturas tienen la tradición de besar, casi todas tienen algo que implique frotarse la nariz, o alguna forma de detectar el olor de la piel de la otra persona mediante el olfato. Este tipo de beso es casi universal, lo cual tiene sentido cuando se sabe que la boca sólo puede procesar cuatro sabores básicos – todas las demás sutilezas de sabor pasa a través del sentido del olfato –.
¿Qué pasa en nuestros cuerpos cuando besamos?
Hay dos tipos básicos de besos: platónicos y apasionados. El mejor ejemplo de un beso platónico es el que se da entre una madre y un bebé, ya que el beso es parte de una unión biológica de gran alcance. Todos los mamíferos (incluyendo los seres humanos) usan el olfato, el tacto y, ocasionalmente, lamen a sus recién nacidos: a esto se le conoce como “reivindicación de comportamiento”. Sin ello, existe una fuerte posibilidad de que nunca surja un vínculo entre ambos. También hay una razón relacionada con la salud: al presionar la boca y la piel de un recién nacido, la madre ingiere los gérmenes y otros agentes patógenos que el bebé está a punto de tragar. Su sistema inmunológico crea anticuerpos contra estos agentes patógenos que son transferidos a través de la leche materna. Así pues, besos, sumado a leche materna es igual a una vida más segura y sana.
Vamos al meollo del asunto: el beso apasionado
Otra vez tiene que ver con el olfato. ¿Sabes que el olor de algunas personas puede hacer que te sientas atraído por ellas? Estos son normalmente con los que tienes una química especial – para respirar –. A la madre naturaleza poco le importa si estás emocionalmente preparado o si tienes poco, mucho o nada en común con esta persona. Ella sólo quiere que tengas bebés sanos. Así que inventó este truco tan fantástico: en los dos primeros segundos de un beso con la boca abierta entre un hombre y una mujer, hay enzimas en la boca de de ella que los análisis de ADN del hombre deciden si tiene un buen estado físico para criar bebés o no.
Tal vez es por eso que casi el 70% de las mujeres se niegan a salir con un hombre de nuevo después de que el primer beso no haya sido bueno.
Todos los besos buenos necesitan un poco de intimidad, y el mejor lugar es la ciudad del amor: alquila Apartamentos en París es fácil, y da el tiempo necesario para desarrollar la técnica.
jueves, 4 de marzo de 2010
simbologia del beso
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